Cuestión de días. En cuestión de días, podemos pasar de uno de los inviernos más raros y "poco invernales" que se recuerdan a vivir mínimas históricas. Y el culpable tiene nombre y apellidos: el vórtice polar. Desde hace semanas, los especialistas están preocupados porque la ruptura de este vórtice empieza a dibujarse en los modelos meteorológicos. Y no es para menos