En líneas generales, consumir alcohol es malo para la salud, y cuanto más, peor. Sin embargo, en algunos casos concretos, es posible que existan excepciones. Esa es una de las conclusiones de un amplio estudio publicado hoy en la revista The Lancet a partir del estudio de la Carga Global de Enfermedades. Analizando 22 indicadores de salud, que van desde las enfermedades cardiovasculares a los accidentes de tráfico o el cáncer, se tomaron datos de hombres y mujeres de entre 15 y 95 años en 204 países de 1990 a 2020