La polio afectó a unos 20.000 niños entre 1950 y 1963 en España, a pesar de que la vacuna ya existía y se distribuía en el resto del mundo. España tardó mucho, más de lo necesario, en administrar la vacuna de una enfermedad que afectaba principalmente a niños y que se cobró miles de vidas y que dejó secuelas en gran parte de la población: la poliomielitis. La vacuna se descubrió en EEUU, y comenzó a administrarse en el mundo en 1955. En España, sin embargo, no se empezó a vacunar hasta 1964, dejando así decenas de miles de niños con secuelas.