El 25 de mayo del 2011, la Organización Internacional de la Epizootias (OIE), algo así como la OMS de la veterinaria, declaró erradicada del planeta una enfermedad infecciosa que no sólo mató a millones de animales, sino que también acabó con la vida de millones de seres humanos.
Sirva este artículo para mostrar que la salud animal y el bienestar de las personas son vasos comunicantes, para contar la historia de una enfermedad terrible que causó enormes sufrimientos, para narrar la carrera global que condujo a su erradicación...