La lamentable farsa de la "renegociación" de David Cameron sobre la membresía de Gran Bretaña en la UE sólo ha servido para subrayar el carácter regresivo y antidemocrático de esta institución (Informe, 16 de febrero). Sabemos que la extrema austeridad forzada al pueblo griego no es sólo no-democrática en sí misma, sino que también profundamente anti-democrática porque las instituciones de la UE nunca permitirán que se exprese la opinión de la mayoría de la población si ésta va en contra el proyecto de libre mercado.
|
etiquetas: ue , institución , democracia