Los cuatro turistas se alojaban en un hotel de Barcelona y han comprado unos billetes de Ryanair con destino Dublín que salía de Reus a las 15.55 horas. Después han pedido un taxi y un Uber. El Uber ha llegado primero y han considerado que le salía más económico. El taxista les ha recriminado la acción, y los turistas les han apaleado, roto una rodilla y dejado tirado en la calle. Han pedido al conductor del UBER que arrancase, pero el taxista había pillado la matrícula y los ha denunciado a los Mossos, que los ha localizado y detenido en Reus.

La víctima encontró con que alguien había puesto un palillo. El operario lo quitó y quedó servible de nuevo. Aún así, engañó a la mujer para poner una nueva.

Vecinos del barrio explicaban esta mañana que «los tiros han empezado a oírse aún de madrugada, como hacia las seis» y « hemos cogido a los niños y nos hemos resguardado, igual que otras veces, porque así no se puede salir. Tenemos miedo». El operativo se ha desplegado alrededor del bloque 11. En uno de los pocos negocios que quedan en la zona comentaban que «hemos abierto la puerta para que entrase alguien y hemos escuchado disparos, muchos, y hemos vuelto a cerrar y nos hemos metido dentro».

Controlar el territorio es clave. Hace días que el rumor de fondo lo anunciaba y ayer ya saltó todo por los aires. La guerra por el control del barrio de Sant Josep Obrer de Reus, en la capital del Baix Camp, ha encendido todas las alarmas en los Mossos d'Esquadra después de un incidente que acabó, en medio de la calle, con una batalla campal,

La abuela murió por culpa de un incendio que se originó en su piso con la vela con la que se iluminaba, ya que la compañía le había cortado el suministro porque acumulaba algunos impagos de las facturas.El caso generó indignación entre la sociedad reusense y el Departamento de Empresa acabó sancionando a Gas Natural por no haber hecho un informe sobre si la víctima se encontraba en situación de vulnerabilidad. Con esta sentencia, el caso no tiene más recorrido judicial.

El domingo pasado, 22 de mayo, un hombre estaba en un parque de Reus. En él coincidió con una niña de unos 10 años de edad que jugaba en su interior. Al parecer, el hombre entabló amistad con la menor y le sugirió ciertas acciones que terminaron en un presunto delito de abusos sexuales. El padre no daba crédito lo que la niña le explicó al día siguiente. La menor explicó lo que le había hecho supuestamente aquel hombre y llamó a la Guàrdia Urbana para explicar lo que podría ser un delito de abusos sexuales a una menor. La Guàrdia Urbana de Re

La vivienda, en Reus (Tarragona), pertenece a dos hermanos peleados por una herencia. La víctima denunció los hechos a los Mossos. En el escrito incluso se habla de que los componentes llevaban un arma de fuego.