En esta especie de nuevo feudalismo digital, El País parece adelantarse al resto del entorno para convertirse en una especie de nueva nobleza. Todo ello, por supuesto, a un grave costo: el valor (credibilidad) que tiene la marca de un medio de comunicación es explotado por dos empresas de Silicon Valley para presentar como racional ante la opinión pública sus planes de futuro privatizado.

Presentado inocentemente en buena parte de los análisis como una carrera hacia la futura presidencia, lo cierto es que los planes del CEO de Facebook son algo más ambiciosos: convertir su país, y allá donde expanda su poder, en una especie de sistema feudal sustentado bajo el más eficaz aparato de las relaciones públicas.

Los Paradise Papers cuentan una historia sobre los métodos del Kremlin para manipular Internet. Yuri Milner, un empresario ruso con grandes inversiones en Silicon Valley, utilizó fondos de dos bancos controlados por el Kremlin para realizar grandes inversiones en Facebook y Twitter.

La ideología californiana, como lo denominaron dos teóricos de los medios británicos en la década de 1990, combinó la libertad personal con la desregulación del mercado. Un principio básico era que plataformas como Google y Facebook eran políticamente neutrales. Eran herramientas para la expresión política, pero no tenían política propia. Aumentarían la votación, pero no la afectarían. Los líderes de la industria defendieron valores que cualquiera podría adoptar: compartir, conectarse, comunidad, apertura, expresión. El idioma que hablaban era

El auge de estos proyectos forma parte de la fiebre inversora de las grandes fortunas tecnológicas en investigaciones antienvejecimiento. Como apuntaban en un artículo reciente en The New Yorker, es como si los Médici, en vez de pagar para ser inmortales a través del arte, estuvieran invirtiendo en ciencia para alargar sus vidas. “Están surgiendo empresas como champiñones, y recaudan grandes cantidades de dinero”

Alicantino, su startup triunfa en EE UU y ha sido uno de los 4 ganadores de uno de los desafíos "más complejos en conducción autónoma de la historia".

"La acumulación de capital supone al mismo tiempo, como diría David Harvey, la desposesión de otras personas y a veces de otros Estados. La mayor parte de las empresas de Silicon Valley tienden al monopolio, forma parte explícita del proyecto de Google y Facebook."

Las empresas tecnológicas más poderosas del mundo comienzan a experimentar con métodos pedagógicos en los que los docentes son redundantes y la extracción masiva de datos el principal fin de todo el sistema educativo.Quien coloque sus aplicaciones en el mercado de la educación personalizada de los colegios, si es que estos tienen presencia física en unos años, tendrá la mejor información para educar a la futura generación de consumidores.

En 2015, un algoritmo de Google Photo etiquetó a dos amigos negros como "gorilas", resultado del programa que había sido sub-entrenado para reconocer caras de piel oscura. Ese mismo año, a un pediatra británico se le negó el acceso al vestuario de las mujeres porque el software que utilizaba para administrar su sistema codificaba automáticamente su título de "médico" -como hombre. Por las misma fechas, un joven padre que pesaba a su hijo de dos años y medio, fue animado por la app diciéndole que todavía "podía perder ese peso".

“No hay ninguna visión democrática y social en el comercio y nunca la ha habido”. Sobre todo lo anterior, Cancela llama a “una problematización urgente de la tecnología y del capitalismo tecnológico” que será, en su opinión, el ataúd en el que el neoliberalismo global acabará enterrando a la soberanía europea.

Una asociación americana, Give Directly, financiada por gigantes de Silicon Valley, ha elegido Kenia para llevar a cabo un experimento único: la renta básica universal. En este vídeo, se exploran los primeros resultados, que serán claves para el impulso o la congelación de la medida en los próximos años.

En la meca de la innovación tecnológica se pone de moda ayunar y beber mucho café. Silicon Valley ha dejado de exportar únicamente ideas tecnológicas y a veces, por eso de tener un halo de innovación, parece que todo lo que venga de este referente tecnológico tiene que ser considerado como una “tendencia”.

Las empresas estadounidenses se enfrentan a una difícil solución de compromiso al tratar con las solicitudes del gobierno, pero deberían simplemente decir no a Arabia Saudí, que está utilizando a las empresas de medios sociales para hacer su trabajo sucio en la censura de los medios de comunicación qataríes. La historia de cumplimiento de las empresas de Silicon Valley con las peticiones de los gobiernos extranjeros es triste, y sin duda ha llevado a una mayor censura en todo el mundo.

Otro de los gerentes era aficionado a tener sexo con su empleado en el baño de la empresa, tanto que esta se vio obligada a reparar y reemplazar al menos dos veces el asiento del inodoro en el que las mantenían, una vez descubierto por qué se partían por la mitad por culpa de estos y que uno de ellos era propenso a pedir a sus compañeras que le compraran lubricante.

El dinero de los milmillonarios es de todo salvo perezoso. Por eso, siempre busca salidas que aporten rédito y ¿hay mayor beneficio que la vida propia? El ecosistema empresarial de Silicon Valley, tan necesitado de productos innovadores, también ha inventado en el gris escenario en el que se mueven los agentes de seguros. Se han creado seguros antiapocalipsis para garantizar la supervivencia en caso de pandemias, terrorismo, terremotos –algo que en California es una amenaza constante–, un Trump fuera de sus cabales y pulsando el botón rojo...

Las grandes empresas tecnológicas muestran su rechazo al nuevo movimiento derechista estadounidense, pero se erigen así en los nuevos árbitros de la libertad de expresión.

Facebook es quien más tiempo consigue mantener empleados, con una media de poco más de dos años.

Los dioses de la tecnología nos están vendiendo a todos un futuro más brillante. Pero la promesa de Silicon Valley de construir un mundo mejor se basa en desgarrar al que tenemos de hoy. La energía de vapor, la electricidad, las líneas de producción destruyeron industrias que existían antes y obligaron a los gobiernos a cambiar. El mundo sobrevivió, la vida mejoró. Sin embargo, esta ola no es como la última, porque tiene el potencial de desgarrar la forma en que funciona el capitalismo. Y nuestras vidas podrían transformarse completamente.

La compañía de Mark Zukerberg ha encargado el proyecto al holandés Rem Koolhaas, que consiguió el Premio Pritzker de arquitectura en el año 2000 por sus diseños vanguardistas. En los primeros bocetos proporcionados por el despacho de Koolhaas se pueden ver multitud de zonas verdes, plazas abiertas, terrazas y, como elemento de marketing, un gran número de niños por sus calles.

La función de Silicon Valley es perforar nuevos túneles para continuar con la integración neoliberal global, preservar la hegemonía estadounidense y fijar nuevos callejones sin salida que sirvan a la ensoñación histórica de que no existe alternativa a este sistema

Google está terminando el proceso de compra de 300 casas prefabricadas a la startup Factory OS, que se dedica a la fabricación de este tipo de viviendas. Según fuentes citadas por el "Wall Street Journal", Google busca aliviar los problemas que tienen algunos de sus empleados a la hora de encontrar un hogar en Silicon Valley. Las casas prefabricadas servirán de hogar temporal para el personal de Google que lo necesite. El valor total de la compra se ubicaría entre los 25 y 30 millones de dólares.

La ideología de Rand censura el altruismo, eleva el individualismo a la categoría de fe religiosa y concede licencia moral al egoísmo más crudo. Rand fue durante mucho tiempo la autora preferida de la derecha libertaria estadounidense, y ahora varios de sus devotos seguidores están en el Gobierno de Trump.

Hay una gran proporción de consejeros delegados psicópatas en Silicon Valley, a los que les dan alas inversores protectores y débiles departamentos de recursos humanos. Así lo ha explicado un panel de expertos en el festival SXSW. Aunque el término psicópata normalmente tiene connotaciones negativas, algunos atributos asociados a este desorden pueden ser ventajosos en un entorno empresarial.

El Saint Francis High School, ubicado en Mountain View, en California, invirtió 14.120 euros en el año 2012 y ha conseguido un retorno de 23 millones. Con este dinero, el centro pretende hacer más accesible la educación católica, reclutar y retener a los mejores profesores y desarrollar programas e instalaciones innovadoras.