El programa de enseñanza bilingüe impulsado por casi todas las comunidades autónomas, es de esas cosas que llegan a gozar del estatus de verdad incuestionable. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, vienen expresándose algunas dudas acerca de la supuesta virtualidad, no de aprender otro idioma, sino de utilizar la enseñanza de la Historia, la Biología o la Física para ello. En sí mismo carece de fundamentos teóricos consistentes que avalen sus ventajas y posibilidades, aunque, eso sí, se trata de un producto ampliamente elogiado y publicitado.