Firma ahora para pedir a Naciones Unidas la prohibición de los mercados de animales vivos. Mercados húmedos que reciben su nombre en parte por la sangre, las tripas, las escamas y el agua que empapan el suelo, restos de animales brutalmente matados para quien desea comer carne recién matada. En imágenes filmadas por Igualdad Animal en China, Vietnam e India, se muestra a animales como ciervos, mapaches, cocodrilos y perros viviendo en condiciones sucias, sufriendo deshidratación, hambre y enfermedades.

Por primera vez en décadas, residentes en la India avistan el Himalaya desde zonas alejadas de la cordillera más grande del mundo. El confinamiento de los 1.3000 millones habitantes y la paralización de las principales actividades industriales decretado por el Gobierno del país asiático con el objetivo de prevenir la expansión del coronavirus han hecho caer los niveles de polución en una de las regiones más contaminadas del planeta. El resultado ha dado lugar a nítidas imágenes de las cumbres nevadas de la cima del mundo nunca antes vistas desd

India está considerando planes para sellar los puntos calientes de coronavirus en Delhi, Mumbai y partes del sur, al tiempo que alivia las restricciones en otros lugares como una forma de salir de un bloqueo de tres semanas que ha causado una profunda angustia económica, dijeron el miércoles funcionarios.

Los padres creen que esos nombres les recordarán las dificultades que superaron al nacer en plena pandemia de coronavirus.

India, en cuarentena desde 24 marzo. Según datos de monitoreo en tiempo real del CPCB de 36 unidades ubicadas en varios puntos, la calidad del agua alrededor de 27 puntos es adecuada para el baño y propagación de vida silvestre y pesca. Si bien el alcantarillado doméstico no se ha reducido, el efluente industrial casi ha cesado y es por eso que la calidad del agua ha mejorado. "El nivel de contaminación orgánica aún se diluye en el río, pero es la contaminación química de las industrias la que destruye las propiedades de autolimpieza del río".

Un grupo de médicos fue atacado con piedras en la ciudad de Indore en el estado de Madhya Pradesh en la India cuando se dirigían a identificar posibles casos de Coronavirus. El grupo fue atacado después pedirle a una anciana sospechosa de haber estado en contacto con un enfermo que les acompañara al hospital para hacerle las pruebas de diagnóstico. Dos doctoras lograron esconderse en un jeep pero resultaron heridas dijo Praveen Jadia, directora de salud de Indore.

Los virus y las bacterias no discriminan ni exterminan a una población, lo hace determinados sistemas político-económicos. Y en la India, el coronavirus y las medidas de su primer ministro ultraderechista Narendra Modi se han dado la mano para hundir el país definitivamente. miles de personas "pudientes" de grandes ciudades arrasaron los supermercados abiertos mientras decenas de miles de trabajadores migrantes huyeron hacia las estaciones de autobuses y trenes para regresar a sus aldeas.

En India, algunos médicos y trabajadores sanitarios comienzan a enfrentarse a un nuevo tipo de ostracismo social en sus lugares de residencia. Sus vecinos, temerosos de que puedan ser portadores de coronavirus, los expulsan de sus viviendas, forzándolos a dormir en el suelo o los baños de los hospitales en los que trabajan. Los casos se multiplican por todo el país. Profesionales del sector sanitario describen el nacimiento y expansión de un estigma social en sus barrios, entre sus vecinos, ante sus arrendadores...

El brusco aumento de casos esta relacionado con una convención de musulmanes el 13 de Marzo, que reunió 3500 creyentes que luego se dispersaron por todo el país. Unos 2000 se quedaron reunidos en el area durante días, la zona se ha convertido en el foco principal en la India.

1 millón de personas viven hacinadas en uno de los suburbios más pobres de la India. La entrada del coronavirus a través de un paciente de 56 años en esta zona de 2,1 Km2 puede ser devastador. Es una de las zonas más densamente pobladas de todo el planeta.

Distanciamiento social y teletrabajo. Estas son dos de las condiciones principales que rigen la cuarentena en la india. Sin embargo, pedir que se mantenga una distancia de dos metros en un país como la India donde millones de ciudadanos son indigentes (alrededor del 4% de la población total) o viven en barrios muy poblados se vuelve complicado. El 80% de los indios trabajan en la economía sumergida y en empleos no cualificados que no se pueden llevar a cabo desde casa por lo que es de suponer que intentarán saltarse el confinamiento.

Fábrica de mascarillas quirúrgicas de triple capa en la India.

Los ocho países que forman la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), China, India, Rusia, Pakistán, Kirguizistán, Kazajstán, Tayikistán y Uzbekistán, han acordado conducir el comercio bilateral, inversiones y bonos a través de sus monedas nacionales abandonando los dólares americanos.

Decenas de miles de trabajadores y sus familias se abren paso hacia los autobuses organizados por el estado más poblado de India, Delhi, para llevarlos a sus regiones de origen en medio de la pandemia de COVID-19.

Los ciudadanos se vuelven a sus pueblos a pie, con el riesgo de propagar el coronavirus.

Imágenes de cientos de trabajadores huyendo de las ciudades hacia sus casas en los pueblos por falta de alimentos en la India

Manuel de Luca, un cocinero barcelonés de 38 años, llegó a la India el pasado 17 de enero para comprobar el funcionamiento de la ONG Imparable, una escuela para niños pobres fundada por él hace un año en Bodh Gaya, al noreste del país. Pasados unos días decidió viajar un poco por el país, solo. La crisis del coronavirus le pilló, junto a otros 60 turistas extranjeros, en un archipiélago paradisiaco en medio del Índico, ya próximo a Tailandia, las islas Andamán y Nicobar.

La policía de la India se las ha ingeniado para aplicar castigos a quienes no cumplan con el aislamiento por coronavirus

Anteayer, muchos indios se frotaban los ojos al ver a familias enteras con niños muy pequeños, en las salidas de Delhi, andando rumbo a pueblos a más de cuatrocientos kilómetros de distancia, en Madhya Pradesh, o incluso a Nepal, a setecientos kilómetros. Ante la indignación por estas escenas, ayer se fletaron decenas de autobuses para devolver a estas familias a su estado, provocando mareas humanas todavía más escalofriantes. Sobre todo, teniendo en cuenta que el objetivo del confinamiento no era otro que evitar el contagio del coronavirus.

Una mujer de 75 años falleció el sábado, un día después de que fue mordida por un hombre que había escapado de la cuarentena doméstica en Jakkamanayakanpatti en Bodinayakanur, cerca del distrito de Tamil Nadu Theni, dijo la policía. Manikandan, de 32 años, fue puesto en cuarentena después de que regresó al distrito, su ciudad natal, desde Sri Lanka, donde trabajaba en una tienda textil.

Los mayores distribuidores en España de hidroxicloroquina, la molécula más prometedora contra el coronavirus, importan el principio activo de India, que acaba de vetar su exportación

Un palo y una moto: así es como la policía está haciendo cumplir la orden de confinamiento en la India.

India apenas cuenta con un doctor por cada 10.000 habitantes, un hospital público por cada 55.000 personas y una cama de aislamiento por cada 84.000. Los 64 millones de personas que malviven en infraviviendas en diferentes urbes del país y el millón y medio que vive en la indigencia se enfrentan solos al virus y al olvido

En algunas ciudades de la India los agentes han usado la fuerza como castigo para los que han decidido saltarse el confinamiento nacional de 21 días anunciado por el primer ministro del país, Narendra Modi, como medida para frenar la propagación del coronavirus. Otros policías han sido más benévolos y han decidido poner a hacer abdominales o flexiones a los ciudadanos que no han cumplido lo dictado por el Gobierno.

India se ha unido a los países cuyos gobiernos han ordenado a sus ciudadanos que se queden en sus casas. El primer ministro, Narendra Modi, ha anunciado este martes en una intervención televisiva que los 1.300 millones de indios deben permanecer en sus domicilios en las próximas tres semanas a partir de esta medianoche.