El consejero madrileño de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha dado este viernes la bienvenida a la decisión del Ministerio de Sanidad de eliminar el uso obligatorio de la mascarilla en el exterior, aunque se ha preguntado qué ha ocurrido entre ayer y hoy para que cambie de criterio y ha pedido al Gobierno "más rigor y fiabilidad" en la adopción de medidas que influyen en la vida de los ciudadanos.

Los informes científicos que justificaron la recuperación de la mascarilla al aire libre, decretada por el Gobierno a finales del pasado mes de diciembre, son de marzo y mayo de 2021. Es decir, la controvertida medida se basó en los datos y la información que se tenía a comienzos del año anterior, sin que se hayan incorporado a la toma de la decisión los nuevos estudios y análisis que se han ido realizando desde entonces sobre el comportamiento del covid, ni tampoco el impacto de las nuevas variantes.

El Gobierno fijó un precio máximo de venta para las mascarillas quirúrgicas -de 0,68 euros- a mediados de noviembre de 2020, siete meses después de que esta cuestión se planteara en un Consejo Interterritorial de Sanidad y, sobre todo, de que el entonces ministro de Sanidad, Salvador Illa, asegurara a los consejeros autonómicos que ya se estaba trabajando en ello.

Isabel Díaz Ayuso anunció que desde el lunes la mascarilla dejaría de ser obligatoria en los patios de los colegios de la región. Después el Ministerio de Sanidad puso distancia, avisando a Ayuso de que no podía aplicar la retirada. Ahora la SER ha podido saber que la advertencia del Ministerio de Darias no era por la medida en sí, sino porque lo anunciara un territorio solo y que la etirada de la mascarilla de los patios aunque no haya distancia de seguridad esá siendo valorada por los experstos según admiten a la SER fuentes de Sanidad

El juzgado de Instrucción número 14 de Madrid ha abierto diligencias previas contra el exministro de Sanidad, Salvador Illa, por la querella presentada por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) tras conocerse el uso de mascarillas defectuosas durante los primeros momentos de la pandemia. el auto del juez señala que se deben incoar Diligencias Previas por el presunto delito contra los derechos de los trabajadores contra Salvador Illa Roca.

Mascarillas al aire libre, hábitos saludables e incoherencias.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, está informando en estos momentos a los consejeros autonómicos sobre cómo se quedará la norma, que se aprobará mañana en Consejo de Ministros y estará vigente desde este sábado 26 de junio

El inicio de las vacaciones veraniegas puede coincidir con una de las noticias más deseadas por muchos: poder disfrutar de los espacios abiertos sin la mascarilla. El buen ritmo de la vacunación, unido al descenso de la incidencia de la pandemia, han provocado que en el Ministerio de Sanidad se haya pulsado el botón del optimismo.

El ministro de Sanidad alemán quiso deshacerse de las mascarillas de mala calidad entregándolas a colectivos de sin techo, personas con discapacidad y perceptores de ayudas sociales

“Es cuestión de semanas. Es muy posible que sea en julio, pero no se sabe cuándo porque hay que modificar la ley de marzo que obliga al uso de las mascarillas. Aunque será sólo en el exterior. Sanidad trabaja en ese momento idóneo y que sea a nivel nacional”. Así lo ha indicado el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, quien advierte sin embargo que el fin de las mascarillas en el exterior también estará sujeto a limitaciones. Si hay concentración de personas y no se puede garantizar la distancia interpersonal,

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, ha avanzado que resulta «muy probable» que «en no muchos días» se pueda relajar el uso de mascarilla en los exteriores, en vista de la buena marcha de la campaña de vacunación contra la COVID-19 y la situación epidemiológica.

Sanidad propondrá a las comunidades el uso de la mascarilla obligatoria en las playas solo para pasear o cuando no se pueda mantener la distancia de seguridad.

El Ministerio de Sanidad llevará este miércoles una propuesta a las comunidades autónomas para “modular” la obligatoriedad de las mascarillas, después de la publicación de la ley que obliga a llevarlas en playas o en el campo sin importar la distancia.Para Simón, “es de sentido común” que hay que revisar la norma publicada el pasado martes 30 de marzo en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y que obliga a llevar mascarilla en todos los espacios, ya sean abiertos o cerrados, y con independencia de la distancia a la que se encuentren

La discusión sobre si se debería obligar al uso de modelos FFP2 en sitios públicos o si las mascarillas higiénicas no son efectivas esquivan un aspecto central sobre estas protecciones contra el coronavirus: mal colocada, hasta la mejor mascarilla es poco eficiente. Aquí, algunas ideas para ajustarlas correctamente.

Las mascarillas son fundamentales para evitar contagios de coronavirus, pero si no las usamos bien, son prácticamente inútiles.

Conocida comercialmente como ‘Rypo’, fue rechazada en su momento por el Ministerio de Sanidad, entre los diferentes proveedores considerados aptos para la adquisición de material sanitario porque consideraron que no cumplía con los requisitos necesarios. El Ministerio de Sanidad adjudicó la licitación el 11 de noviembre, trece días antes de que el Ministerio de Transportes la escogiera.

El deseo de que la vacuna se haga realidad en 2021 está cada vez más cerca. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el pasado lunes de que "una parte muy sustancial" de los españoles serán vacunados contra el coronavirus antes del próximo mes de julio. La llegada de esta salvaguarda, sin embargo, no implica que se pueda dejar de usar la mascarilla a lo largo del año que viene.

«Quitarse la mascarilla tal vez sea opcional dentro de dos años». El doctor Pedro Cavadas, que no ha ocultado su escepticismo respecto a los plazos que ha ofrecido el Gobierno respecto a la vacuna del coronavirus, tampoco se muestra especialmente optimisma sobre los avances en la lucha contra la pandemia que permitan a la población prescindir de la protección facial cuyo uso resulta obligatorio en España desde el pasado mes de mayo.

El optimismo surgido tras la llegada, cada vez más cerca, de las vacunas contra la Covid-19 y el anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que en los primeros seis meses del año una buena parte de la población (se habla del 50%) esté vacunada, ha hecho pensar a muchos ciudadanos en el fin de la obligación de usar mascarillas a partir del verano. Pero, no es así. Las mascarillas han venido para quedarse mucho tiempo, por lo pronto, todo el 2021.

Las mascarillas quirúrgicas no podrán venderse al público general a más de 72 céntimos de euro, según el nuevo precio máximo que ha acordado este jueves la Comisión Interministerial de Precios de los Medicamentos (CIPM). Supone una rebaja del 25% con respecto al precio máximo que existe actualmente, fijado en 0,96 euros, 24 céntimos menos.

La ministra de Hacienda ha defendido los Presupuestos Generales del Estado asegurando que se trata de un "proyecto de país, no del Gobierno".

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha retirado del mercado varios lotes de mascarillas, 35 en total porque incumplen la normativa vigente en relación al coronavirus. También hay guantes e incluso batas médicas de protección frente al Covid-19 que han sido retiradas. Sanidad pide colaboración a los comercios para frenar e impedir su venta y a los usuarios que las desechen o devuelvan. Algunas de ellas se están vendiendo en hipermercados, tal como Lid, Alcampo, etc.

Ministerio de sanidad retira mascarillas por motivos varios por incumplir con las certificaciones y la protección contra el Covid-19

Ayer se celebraron los premios del periódico La Razón, una de las premiadas resultó ser la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por su gestión sanitaria

Acabo de ganar la batalla al cáncer de próstata. Ha sido una lucha contra el reloj de meses en los que me he topado con muchos, demasiados obstáculos en la sanidad pública. Eternas y angustiosas esperas, que irremediablemente me han acabado empujando muy a mi pesar hacia la sanidad privada. Me estaba jugando la vida y me urgía buscar una salida que la sanidad pública ha sido incapaz de darme. Ha sido una decisión dolorosa para alguien que como yo es ferviente defensor, casi obsesivo, de la sanidad pública, convencido de que es uno de los grande

España es un país solidario que pone por delante los derechos humanos y va a seguir dando pasos firmes contra el genocidio y por el alto el fuego.

La patronal ASPE se revuelve contra la ministra Mónica García y advierte de que la Ley de Gestión Pública del SNS sería “incompatible” con la Constitución.

Esto de Belén Gonzalez comisionada de Salud Mental: "Desde este comisionado vamos a impulsar un plan integral para la deprescripción de psicofármacos y vamos a promover la prescripción social como alternativa, de manera que si un persona necesita acompañamiento domiciliario por soledad no deseada debemos poder prescribirlo de la misma forma que hacemos con las por pruebas o los fármacos. Grupos de deporte en lugar de Rubifén, asociaciones feministas en lugar de sertralina, o un sindicato en lugar de lorazepam”.

Acuerdo entre los trabajadores de la sanidad privada de la Comunidad de Madrid y la patronal que evitará la huelga que se había convocado desde el 4 de junio. El complemento reconocido que pone fin al conflicto tras el acuerdo con la Asociación de Centros de Hospitalización Privada de la Comunidad de Madrid (ACHPM), que estaba recogido en los artículos 18 y 64 del convenio colectivo firmado en julio de 2023, incorpora el reconocimiento de lo que en la sanidad pública se conoce como Carrera Profesional.

Tras sufrir en sus carnes la vulnerabilidad de un cuerpo humano defectuoso. Esther Sanz defiende ahora la sanidad publica y las ventajas del Estado de Bienestar que tanto critica y tanto lucha por destruir su antiguo partido.

Tras más de dos años de negociación, los sindicatos CCOO y UGT se han levantado de la mesa para la renovación del convenio colectivo de la sanidad privada. El objetivo no es otro que actualizar un convenio que decayó hace ya catorce años y que mantiene las tablas salariales congeladas desde entonces (aunque algunas categorías han mejorado ligeramente para alcanzar al menos el Salario Mínimo Interprofesional).