Ha pasado más de un siglo desde que el sociólogo alemán Robert Michels, seguidor de Max Weber, acuñara su famosa tesis sobre la “ley de hierro” de los partidos políticos y el problema no ha hecho más que agravarse. Michels ya alertaba de que la democracia no peligraba por los excesos del capitalismo, sino por los vicios adherentes a los partidos políticos. Hace tiempo que los partidos se han convertido en enormes e influyentes empresas de intereses que invaden la sociedad y todos los espacios públicos e instituciones. Sus mecanismos de ascenso
|
etiquetas: pablo iglesias , podemos , partidos políticos