Más allá de provocar un terremoto en Hollywood, la eclosión del movimiento
#MeToo ha traído consecuencias en ámbitos mucho más cercanos para la mayoría de la población. Y aunque en primer lugar podía parecer que las mujeres iban a salir beneficiadas, esto no está tan claro. Uno de los lugares dónde se ha registrado un cambio más notable en las dinámicas entre hombres y mujeres ha sido en las oficinas. Y no precisamente en favor de las mujeres.