Un hombre de 50 años se ha presentado al centro de vacunación COVID-19 con un antebrazo de silicona intentando engañar a los enfermeros. La prótesis era muy similar a la verdadera piel, pero el color y el tacto diferente hicieron sospechar a la enfermera que le solicitó mostrar todo el brazo. Una vez descubierto el hombre intentó convencerla para hacer la vista gorda. Denunciado a los caribinieri.
|
etiquetas: covid , vacuna , italia , antivacunas