El Departamento de Seguridad Nacional ha separado a más de 700 niños de inmigrantes que afirman ser sus padres en la frontera desde octubre, informa The New York Times. Según los informes, más de 100 de esos niños tenían menos de 4 años en el momento de la separación. La administración Trump ha propuesto en repetidas ocasiones la implementación de una estricta política de separación en la frontera para disuadir la inmigración, pero los funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional han negado que dicha política esté llevándose a cabo.
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