Saja, de cuatro años, y Huda, de tres, jugaban en el patio delantero de su casa, en uno de los barrios surgidos espontáneamente en la capital y que se han extendido de manera significativa en los últimos años. Las dos niñas descalzas, vestidas con ropas polvorientas y raídas, corrían alrededor de montones de basura y residuos, por un irregular camino de barro cubierto de grava burda y fragmentos de vidrio.Más chabolas aparecen en Bagdad, añadiendo una ola de refugiados a los que ya viven en la extrema pobreza
|
etiquetas: iraq , congelación presupuestos , aumento pobreza