La Comisión Liquidadora de Radiotelevisión Valenciana ha alertado a los trabajadores de Canal 9 de que el agua que sale de los grifos no es apta para el consumo humano, al haberse detectado valores de parámetros microbiológicos de bacterias que superan el nivel establecido legalmente. En la actualidad, acuden a diario unos 80 trabajadores al Centro de Producción y Programas de Burjassot, donde se custodia el archivo audiovisual a la espera de decidir su ubicación final, al estar RTVV SAU en liquidación.
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