Las consecuencias inciertas y el siguiente paso

Tengo la firme convicción de que la lucha contra el cambio climático depende hoy fundamentalmente de la política: de nuestra capacidad de construir cuanto antes un bloque climático y democrático mayoritario (ojalá con grandes dosis de socialismo). Sin duda, la tecnología, la disponibilidad de minerales o combustibles fósiles y el precio de las energías renovables son importantes pero el verdadero nudo gordiano de la transición ecológica está en esa esfera autónoma, pero no independiente, que es la política. Supongo que esta visión tiene algo de

[#1 SeñorPresunciones]

¿La lucha contra qué? No que va, la nueva ola política retardomongólica que está arrasando en el mundo, prefiere que lo aceleremos y nos quedemos mirando como se va a todo a la mierda.

[#3 Verdaderofalso]

Hemos decidido mediante votaciones democráticas escoger pisar el acelerador aún viendo el barranco delante nuestra.
Pues a fondo!!!

[#2 La_Prensa]

Por empezar igual que el artículo...

Tengo la firme convicción de que nos vamos a ir a la mierda y nadie, o al menos ningún grupo con el poder suficiente para evitarlo, va a hacer nada por remediarlo.

Antes de que llegue Booster Félix o como sea que se llame, con su historia de traer niños a la pobredumbre y esas historias, el cambio climático (no precisamente eso, sino la capacidad de cargdrnos el planeta, verlo en directo y no hacer nada por remediarlo) es lo que realmente me hace arrepentirme de haber tenido hijos

[#4 alehopio]

La única posibilidad que tiene la humanidad es el milagro del descubrimiento de una fuente de energía barata e infinita (cosa que no va a pasar) o bien el decrecimiento (que va a ocurrir a la fuerza). En ambos casos el tiempo corre en nuestra contra: el crecimiento exponencial en los efectos de retroalimentación climática ya han empezado, y a medio plazo serán ya humanamente imparables.