Algunos profesionales la tachan de auténtico estropicio, sin embargo otros la califican como una idea brillante, publicidad creativa que no pasa desapercibida a nadie ya que todo aquel que se fija en la valla desde el ángulo (in)correcto se ve casi obligado a comprobar ya sea a pie o por el retrovisor que sus ojos han visto lo que han visto, un culo o codo en toda regla
|
etiquetas: valla , publicidad , fallo , error