Si quieres lucir una piel con aspecto saludable, fresca y joven, el agua fría es tu mejor aliada. Una ducha de agua fría produce una gran sensación de bienestar y relajación, debido a que estimula la liberación de componentes químicos en el cerebro que hacen mejoran tu humor, alivian el estrés, la depresión y la ansiedad. Tiene alto poder limpiador y purificante, estimula la eliminación de toxinas, mejora la calidad del sueño la respiración y aumenta la fertilidad, tomen nota.