En la apasionante y reñida XLVII edición de la Superbowl, Baltimore finalmente consiguió imponerse. Fueron superiores hasta el apagón en el Superdome de Nueva Orleans, tras el cual Kaepernick comenzó a brillar, aún sin poder dar la victoria a su equipo. Alicia Keys ha sido la encargada de cantar el himno de Estados Unidos y la también cantante estadounidense Beyoncé, la protagonista del espectáculo musical de la media parte.