En Túnez, de lo que hablaremos otro día (a ser posible cuando se aclare qué está pasando), una de las principales razones para las protestas ha sido el paro: un 15%. O eso dicen. La primera conclusión que debemos sacar es que españa, en realidad, no es ni grecia ni irlanda, ni túnez. No termino de pillar bien dónde andamos, pero debe ser al alimón con algún país subsahariano. Aunque eso sí, con ipod y muchas más moderneces, ya saben, antes muertos que sencillos.