La localidad zaragozana de Mequineza ha rendido hoy homenaje a los vecinos que fueron deportados a campos de concentración nazis, instalando un monolito con una placa conmemorativa en los jardines del Museo de la Historia. La placa, con la inscripción "que su recuerdo sirva de experiencia", recuerda a los siete mequinenzanos internados en los capos de Mauthausen, Hartheim, Gusen, Buchenwald, Ravensbrück y Bergen-Belsen, ha informado el ayuntamiento de la localidad.