Ashley Massaro, una de las más populares luchadora del wresling americano (WWE), se encuentra bajo sospecha estos días ya que, según ha publicado la revista Rolling Stone, fue acompañante y prostituta de lujo de famosos y ricos en EE UU, llegando a cobrar 25.000 dólares por noche. En EE UU se persigue duramente la práctica de la prostitución y varios son los deportistas de alto nivel que han sido sancionados por este hecho en el país norteamericano.