Algunas de las piedras alineadas tenían más de 7.000 años de antigüedad | Un total de 39 menhires prehistóricos fueron destruidos en la localidad francesa de Carnac (noroeste) para construir una tienda de una cadena de bricolaje, según informa el diario regional Ouest France tras la denuncia de la asociación Sites&Monuments.

La comuna francesa de Carnac, en el departamento de Morbihan en la costa noroccidental de Francia, es famosa por sus alineamientos de menhires, contabilizando casi 3.000 de estos megalitos que fueron levantados durante el neolítico entre el año 6.000 y el 2.000 a.C. Pero la zona también alberga otra estructura prehistórica, a primera vista no tan espectacular como los alineamientos pero desde el punto de vista arqueológico igual de impresionante. Se trata del túmulo de Saint-Michel.

Los Alineamientos de Carnac, o las piedras de Carnac, son una colección bastante grande de lugares megalíticos que están alrededores de la villa francesa del mismo nombre, en Bretaña, al noroccidente de Francia. En este lugar los visitantes pueden ver más de 3.000 piedras que están puestas en posición vertical que datan de épocas prehistóricas y que constituyen una de las colecciones de este estilo más raras de todo el mundo.

Una leyenda cuenta que se tratan de legionarios romanos petrificados en su formación cuando perseguían a San Cornelio. Otros dicen que es el fósil de una descomunal serpiente que se habría arrastrado por la Bretaña francesa en tiempos inmemoriales. Incluso hay quien se ha atrevido a afirmar que en realidad son balizas de señalización para navegantes espaciales. Sea lo que fuere, los Alineamientos de Carnac tienen más de 6.000 años de antigüedad, están formados por 4.000 menhires que ocupan 40 hectáreas extendiéndose a lo largo de 4 kilómetros

A mediados del siglo XVI el rey Juan III de Portugal decidió regalarle su elefante al archiduque Maximiliano de Austria aprovechando su estancia en Valladolid. El elefante, de nombre Salomón y más tarde Solimán, atravesó Portugal y Castilla, el Mediterráneo, Italia, los Alpes y finalmente el Danubio hasta Viena. A mitad de camino hubo un milagro y al final otro. Esa es la historia.