La denuncia, compuesta de ocho apartados, plasma una serie de "irregularidades" de las que ha tenido constancia IU desde 2008 y entre las que destacan una serie de "créditos de escasa solvencia" o en condiciones "ventajosas" para algunos consejeros de Caja España, Caja Duero, Caja de Burgos, Caja de Ávila y Caja Segovia. De igual modo, se incluyen una serie de préstamos "irregulares" en el seno de Caja España entre los años 2006 y 2009 cuando se concedieron a uno de sus directivos, Santos Llamas, préstamos a empresas vinculadas a su propiedad