El cantante portugués publica un vídeo cantando la popular canción de Mikel Laboa

Acabó el "mandato", como a él le gusta decir, del portugués Salvador Sobral en Eurovisión. En la hora del adiós, el cantante concedió una entrevista en la que critica con dureza las canciones que se escuchan en el certamen. Según él, "el problema de quienes participan en Eurovisión es que tienen que cantar siempre igual y encima es que lo que cantan es una mierda". Dice que "Toy", de la israelí Netta que ganó este año, es "una canción horrible". Sobre él, comentó que "es el funeral del Salvador Eurovisión y el nacimiento del Salvador músico".

Salvador Sobral ha concedido su primera entrevista tras el trasplante de corazón. Asegura que los medicamentos que debe tomar hacen que su voz sea más frágil, pero está convencido de que no tardará mucho en recuperarse. De momento no desea averiguar la identidad del donante.

Primera entrevista a Salvador Sobral tras su trasplante de corazón. El cantante quiere estar preparado para reaparecer el 12 de mayo en plenas facultades en el Festival de Eurovisión y a partir de ahí iniciar la gira del regreso de Sobral por todo Portugal.

La operación se llevó a cabo en el Hospital Santa Cruz de Lisboa. El cantante, de 27 años, ingresó en septiembre pasado en el hospital y se encontraba a la espera de un órgano compatible. Según los médicos, el ganador de Eurovisión 2017 evoluciona "muy bien" y está "muy animado".

El ganador de Eurovisión lleva más de un año en lista de espera. Sigue hospitalizado y en estado grave, algo que puede empeorar si no aparece un donante cuanto antes.

El triunfo de Salvador Sobral el pasado sábado en Eurovisión, además de mostrarnos entre otras cosas, y como él mismo dijo, que la música, la música de verdad, nada tiene que ver con los fuegos de artificio, supone también una oportunidad para demostrarnos que otra masculinidad es posible.

Salvador Sobral, aunque los presentadores no hayan querido decirlo, tiene una complicación en el corazón. De hecho, está en lista de espera para ser intervenido, pero la lista de espera es larga. Y lo malo es que su dolencia no espera. No obstante, es posible que esta victoria dé un espaldarazo a su operación.