A mí dicha sentencia contra los chavales, si se hubiese limitado a condenarlos por mantener relaciones sexuales con una menor de 16 años, me parecería perfecta y ajustada. Tenemos unas leyes y esas leyes, que son las que nos permiten establecer un marco en el que movernos todos en igualdad, indican que no se puede trajinar alguien mayor de edad a otro alguien menor de 16 años, con consentimiento o sin él. Es decir, que ese delito existía.