Observaciones realizadas a través del radar de la nave Cassini de la NASA han descubierto una zona de la superficie de Titán, una de las lunas de Saturno, que se infla con el calor, tal y como hace un bollo de pan en el horno. Por ello, los científicos creen que se puede tratar de lo que en la Tierra se conoce como un lacolito, una intrusión formada por magma que empuja de abajo a arriba.