En el último año, tres casos han despertado la atención del periodismo que se hace en la región norte de Centromérica. Tres casos en los que periodistas reconocidos y representando a grandes medios violaron los acuerdos de confidencialidad, manipularon la información para volverla más atractiva o simplemente mintieron para conseguir beneficios. Todos pusieron en riesgo a otras personas. Javier Arcenillas, quien entró a una prisión en San Francisco Gotera, en el oriente salvadoreño, a tomar fotografías de expandilleros, hombres retirados de…