Una burgalesa de 17 años, falleció en la madrugada de ayer, en la clínica Primero de Octubre, de Madrid, a raíz de una grave infección provocada por una espina. La joven fue trasladada, muy grave, el pasado día 3 a Madrid desde el hospital General Yagüe, de Burgos, donde, según la familia, no se le realizaron las pruebas pertinentes. La familia planea denunciar por presunta negligencia a los médicos que la atendieron en Burgos.