En España el accionariado de las compañías eléctricas está trufado de participaciones públicas, solo que no corresponden al Estado español. Con dos asteriscos, los dos gestores de las redes, la de gas y la de electricidad. Tanto en Enagás como en Red Eléctrica, la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) está presente como accionista de referencia. Sin embargo, Endesa, Iberdrola, Naturgy, Cepsa, Viesgo o la propia Enagas tienen inversores estatales extranjeros en su capital, aunque con distinto peso y capacidad de decisión.