Dalí, Caravaggio, Siqueiros y otros grandes, fueron figuras rebeldes que no detuvieron su ímpetu ni siquiera tras las rejas. Pintores, escritores, literatos y diferentes figuras artísticas nacieron con un espíritu vibrante y siempre en busca de más. Nadie podía pensar que Pollock, por ejemplo, bebiera tanto y cambiara el rumbo del arte al mismo tiempo, o que la conflictiva vida personal de Modigliani hiciera que pintara algunos de los mejores desnudos en la historia pero que, ebrio y drogado, fuera capaz de marcar el rostro de su amante con...