Durante el primer trimestre de 2016, una vivienda protegida fue de media un 34,2% más barata que una libre, según datos del Ministerio de Fomento. Es decir, la diferencia entre el precio de una VPO y el de una vivienda libre cada vez es mayor. Sin embargo, como recoge Idealista, hay 12 provincias de España y una comunidad autónoma (Castilla-La Mancha) donde, aunque sorprenda, la vivienda protegida acaba siendo más cara que la vivienda libre.