La negativa ha sido contundente, sin nada del lenguaje diplomático que se usa habitualmente en la Unión Europea. La comisaria de Justicia, la checa Vera Jourova, ha rechazado de plano este viernes la petición del Gobierno español de revisar la euroorden a raíz de los fallos en el sistema que a su juicio ha revelado el caso del expresidente catalán, Carles Puigdemont. Los socios de la UE ni siquiera están dispuestos a examinar las propuestas del ministro de Justicia, Rafael Catalá: no ven problemas graves de funcionamiento.