La Audiencia de Barcelona ha absuelto a los doce CDR que el 23-F de 2018 se encadenaron una hora ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) para reclamar la libertad de los líderes del procés, porque fueron pacíficos, no alteraron el orden público y no impidieron el acceso al edificio. Fueron pacíficos, no alteraron el orden público y no impidieron el acceso al edificio, según el escrito. La Fiscalía pedía hasta dos años y medio de cárcel por desobediencia, resistencia a la autoridad y desórdenes públicos.