La indefensión del ciudadano de este país ha alcanzado cotas que, creo, llevan camino de ser difíciles de superar. La corrupción sistémica y endémica de prácticamente toda la clase política. Su impunidad total, gracias, a tres factores: sus privilegios, que cuando les fallan, cambian las leyes para no ser condenados, que cuando les falla, tiran de jueces corruptos y afines a ellos para salir impunes. Este triple seguro de los políticos está siendo devastador para este país y para toda la ciudadanía en general.