Sí, está claro que cuando empecé este proceso judicial, que duró cinco años, no esperaba que después me fuese a encontrar en la más profunda soledad. Y menos habiéndolo ganado. Pero cuando uno ataca a la FIFA, a la UEFA y a la federación belga, luego busca trabajo y no lo encuentra. He estado totalmente aislado. Hace poco he dejado de cobrar del CPAS, la última ayuda social en Bélgica para quienes ya no reciben subsidio de desempleo.