(...) Antonio Tejero, el provecto guardia civil golpista, se nos ha fugado estos días del ataúd de las efemérides, declarando en una entrevista a El Español de Pedro Jota el secreto a voces mejor guardado de la vergüenza española: nuestro rey de entonces, el gamberrete Juan Carlos I, fue uno de los inspiradores de una asonada que nos pudo conducir a una guerra civil, o a unos muertos, o a algo. Y qué bien supo rentabilizar el follantisco borbón su discutible fracaso.