Ismael, Josué, Saúl, y Steven, de entre 11 y 15 años, salieron a jugar al fútbol el 8 de diciembre y no regresaron. Su desaparición conmociona al país ante la falta de información y presunta participación de militares. Aumenta la presión sobre el gobierno para que de explicaciones tras 2 semanas de silencio. Associated Press informó que imágenes de cámaras de seguridad muestran a 2 menores capturados por hombres vestidos con uniformes militares y subidos a una camioneta. Son puestos boca abajo y a uno un militar le da un puñetazo en la cabeza.