Supongo que eso fue mucho antes de que los maestros nos adoctrinasen, porque lo cierto es que poco a poco fui dejando de oírselo decir a los críos. Cuando yo era uno de ellos, también tuve un maestro. Y debo reconocer que nos fue cambiando. El profesor modificó y moldeó nuestra conducta y probablemente la de los alumnos de otras muchas clases antes y después de la mía. La vida seguía y nosotros íbamos tomando nota. Yo aún no lo sabía, pero lo que aquel hombre nos estaba enseñando era respeto.
|
etiquetas: adoctrinamiento , profesor , educación , marica , respeto