La mayoría de grandes recuerdos que guardamos en la biblioteca de nuestra mente tienen un mismo patrón: están marcados por la emoción, aquello que nos mueve en la vida. El resto es el decorado, donde cada uno añade lo que la ciencia ha denominado como los recuerdos falsos verdaderos. Ocurre también que la misma ciencia se ha dado cuenta de que no sólo somos capaces de crear recuerdos (falsos) personales, sino también de construirlos para otros. Por eso hace unos años se llevó a cabo uno de los estudios más importantes sobre la memoria.
|
etiquetas: frank healy , memoria , elizabeth loftus , hsam patihis