La compañía GD Pork lo habría importado durante años en un intento de obtener una ventaja ilícita sobre sus competidores, a través de una nueva genética. Torben Soerensen ha sido sentenciado a tres años de prisión, mientras que Henning Laue enfrenta una sentencia de dos años después de declararse culpable de violar las leyes de cuarentena y bioseguridad.
|
etiquetas: australia , semen de cerdo , botellas de champú