La iglesia más alta del mundo está bajo ataque – y el agresor es orina humana. La magnífica torre de 162 metros de altura de la catedral de Ulm domina la ciudad alemana del mismo nombre que se encuentra en el río Danubio, en Baden-Württemberg. Ahora los funcionarios encargados de su mantenimiento dicen que la base de piedra de la torre gótica, que ha funcionado como un lugar de llegada para los trasnochadores que buscan para hacer sus necesidades, está siendo erosionado por la sal y ácidos de la orina, reporta Südwest Presse.
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