Oscilaciones en el interior de Saturno hacen que el gigante gaseoso se mueva ligeramente. Esos movimientos, a su vez, provocan ondas en los anillos de Saturno. Los hallazgos sugieren que el núcleo del planeta no es una bola de roca dura, como habían propuesto algunas teorías anteriores, sino una sopa difusa de hielo, roca y fluidos metálicos, o lo que los científicos denominan núcleo "difuso". En español:
bit.ly/3m71EBw