Los productos farmacéuticos y cosméticos se prueban en animales; pruebas caras, con problemas éticos y a menudo no predicen con exactitud reacciones humanas. Recientemente, la UE apoyó el proyecto RISK-HUNT3R para la próxima generación de métodos de evaluación de riesgos sin animales. La Universidad de Viena desarrolló el software MolCompass, con gráficas interactivas que muestran compuestos químicos en un plano 2D, asistiendo en las predicciones de una IA. Está en libre acceso en GitHub.
- Paper:
dx.doi.org/10.1186/s13321-024-00888-z