Un patatal y una protectora de animales lindan con una nave blanca que poco o nada hace presagiar un mar interior plagado de langostinos. Está en el lado derecho de la carretera autonómica CL-602 que une Toro (Zamora) con Cuéllar (Segovia). Un ejemplo único en Europa de acuicultura sostenible que ha puesto a Medina del Campo (Valladolid) en el mapa gastronómico. Lo ha hecho con un crustáceo azul que ha logrado seducir a la alta cocina con su calidad 'sushi' –ideal para ser consumido en crudo– y que presume, además, de ser 100 % español.
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