Las imágenes CCTV muestran como la joven intenta desesperadamente echarse agua en la cara antes de desmayarse. El vídeo fue grabado después de que la víctima fuera atacada en un autobús en el barrio londinense de Brixton. El dueño de la tienda, Mohammed Raffiq, y algunos clientes trataron de ayudarla con botellas de agua. "Gritaba y tenía claramente mucho dolor" contó Raffiq. Más adelante los bomberos le aplicaron más agua con una manguera.
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