Si un senderista ve a un mastín, nunca debe ir a tocarlo, mejor mantener una distancia prudencial de seguridad y seguir caminando, mantener la calma, no correr ni gritar, no darle comida ni amenazarles con palos o cualquier otro objeto. Si el senderista lleva perro, resulta conveniente que lo lleve atado, cerca del dueño, y evite el contacto directo de ambos animales. Si van acompañados de menores, mejor que estén cerca de los adultos. En caso de ir en bici, se recomienda bajarse y continuar a pie hasta ganar distancia.
|
etiquetas: la rioja , pastoreo , mastines , carteles