Un líder tóxico y abusivo recurre a tácticas intimidatorias (gritos, insultos o humillaciones) y utiliza el miedo como herramienta para mantener el control y obtener resultados. Estos líderes suelen mostrar poco interés por el bienestar de sus empleados y carecen de empatía hacia sus necesidades personales o profesionales, culpando incluso a otros del trabajo mal realizado por ellos mismos. En general, provocan un clima de trabajo estresante que puede generar problemas de depresión, ansiedad y estrés crónico en los empleados afectados.
|
etiquetas: trabajo , empleo , trabajadores