Fueron los responsables de una oficina de Bankia los que pusieron la primera piedra de una operación que terminó con una residencia de ancianos ilegal en Murcia desmantelada y con sus responsables acusados de drogar presuntamente a una mujer octogenaria, impedida y con Alzheimer, para robarle hasta 36.000 euros de una tacada de su cuenta bancaria. Le habían hecho consumir ketamina y tenía moratones por todos los brazos.
|
etiquetas: murcia , residencia , horrores